Hoy es lunes 2 de noviembre
de 2015, estoy en casa, no hubo labores en la Universidad del
Pedregal, tal vez se tomó la decisión para mantener la tradición del Día de
Muertos. Estaba pensando en Uds. y recordaba lo contentos que se ponían al
comprar las frutas y los dulces para la ofrenda cuando yo era niña, a mí me
gustaba picar los papeles de colores para adornar cada una de las manzanas y
naranjas….de pronto volví a la realidad porque llegó un mensaje a mi celular (un
teléfono móvil que para ti papá, fue desconocido y para ti mamá, por más
esfuerzos que hice, nunca te llamó la atención) de Eric Barrera, con una liga
al blog de la Universidad en dónde él ha escrito un artículo y me ha interesado (Consúltalo aquí).
Reflexiono sobre el mundo
físico que han dejado, se ha vuelto totalmente dinámico , una de las formas más
populares de comunicarse es por medio de las redes sociales, gracias a ellas
todos los días y a todas horas realizamos recorridos virtuales a la deriva de
forma interactiva que nos permiten conocer tradiciones culturales de todas
partes del mundo y algunas las asimilamos como propias, aún recuerdo cuando a
mi hermano y a mí nos decían que el Halloween “era una costumbre extranjera”,
tal vez se hubiesen “horrorizado” viendo a sus nietos vestir con trajes de
vampiros y brujas un 31 de octubre pero el 1 y 2 de noviembre cambiar por los
de elegantes catrinas y catrinos . Es
cierto, como menciona Eric, vivimos en una aldea
global retomando los conceptos del experto en comunicación Marshall McLuhan
o si le hacemos caso a Javier Echevarría filósofo español habitamos en una telépolis, ciudad que se forma
por comunicaciones a distancia mediadas por diferentes tecnologías de la
información y comunicación.
La tecnología ha permitido
que las tradiciones sean globalizadas, sigo pensando que lo importante es
entender de donde vienen y que lazos de identidad generan para cada una de las
sociedades donde se han practicado de manera tradicional, así podremos convivir
con ellas sin perder nuestra identidad cultural. Hoy en día las calaveras de azúcar, las catrinas y las
veladoras están a la par de las
calabazas, las brujas de sombreros puntiagudos y los gatos negros. Forman parte de nuestro imaginario, todo lo
hemos metido a nuestro molcajete.
En tres días hemos pasado por la fiesta de Halloween, tal vez el último
reducto popular de una tradición druida que se reflejó en la hechicería
occidental que antecede al Cristianismo primitivo. La Iglesia Católica
Apostólica y Romana a largo de su historia le ha dado al mundo que la profesa el
sentido de los días que conocemos como Todos Santos y Fieles Difuntos, también hemos celebrado a Miccailhuitontli
conocida como la fiesta de los muertecitos y Hueymiccailhuitl la fiesta grande
de los muertos dentro de la tradición mexica, por cierto, para ellos la muerte
no era vista como final de la existencia sino como parte de ésta; por eso era
más bien, una fiesta de vida..… son las
12 del día la hora en que, según Uds. me enseñaron todas las ánimas que nos
visitan “ recogerán sus pasos”, giro la vista y la llama de la veladora que he
puesto en la ofrenda para alumbrar su camino de regreso al Mictlán, ese lugar
mítico mesoamericano al que se le denomina
“ el lugar de los muertos” se encuentra serena.
Gracias por venir, siempre están en mi corazón. Ome Teotl !
Patricia Morales
La Mtra. Martha Patricia Morales Rubio es docente de la Universidad Del Pedregal desde hace trece años impartiendo asignaturas como Teoría de la imagen, Historia de la imagen y la comunicación visual e Historia de la Arquitectura y ka Ambientación entre otras.
La Mtra. Martha Patricia Morales Rubio es docente de la Universidad Del Pedregal desde hace trece años impartiendo asignaturas como Teoría de la imagen, Historia de la imagen y la comunicación visual e Historia de la Arquitectura y ka Ambientación entre otras.
Los puntos de vista expresados en este artículo son responsabilidad del autor y no necesariamente representan la posición de la Universidad Del Pedregal.
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