martes, 8 de marzo de 2016

En Memoria de Enrique Canales Liceaga

Extracto del artículo del Dr. Armando Martínez Gómez, Rector de la Universidad Del Pedregal, titulado: "Enrique Canales y su legado educativo" publicado en el Periódico "Impulso" en junio del año 2015.

Lic. E. Canales (Q.E.P.D.)
Enrique Canales Liceaga, nuestro querido Enrique, hoy desde la Casa del Padre es testigo de esta gran obra, que es su legado, para el progreso de nuestra patria, él fue el sembrador que nos ha permitido cosechar grandes parabienes para México.

Muchas personas conocieron Enrique como charro, por cierto uno de los grandes, como un gran aficionado los autos, como una persona de un vestir casual y sencillo pero que sabía portar con una elegancia sin igual los trajes, siempre con una gran sonrisa en los labios y alegría por la vida, una mente privilegiada para los números y que conocía a detalle a cada una de las personas que con él colaborábamos, así, de esa personalidad nació nuestra Universidad.

Lic. E. Canales (Q.E.P.D.) y Lic. L.A. Canales
Según contaba Enrique, ya estando consolidada la gran obra de su padre, Don Enrique Canales Leal, con la tradición de la primaria, secundaria y la pujante preparatoria, él insistió en que había que fundar una universidad en la que se necesitarían simplemente aulas dignas, profesores competentes, alumnos con ganas de aprender y planes de estudio de excelencia. Así, con esa visión nacimos, con las primeras generaciones compartiendo salones con la preparatoria y no fue hasta después de una década que se inauguraron las instalaciones que hoy disfrutamos.


Enrique personalmente hacía los trámites de los planes de estudio ante la Secretaría de Educación Pública (SEP) y contrataba a los maestros, casi siempre doctores o gente muy reconocida en su ámbito, éramos muy sencillos en nuestros procesos, la rutina era: los maestros impartían su cátedra y los alumnos la disfrutaban aprendiendo, además Enrique supervisaba que cada clase se cumpliera cabalidad y estaba muy pendiente de cualquier necesidad que se presentara en la Universidad.

Con el cambio de instalaciones vino una transformación de nuestra Universidad, se decidió no ser solo conocidos en nuestras aulas sino que ya era inminente la consolidación como protagonistas del debate nacional, así que se diseñó y estructuró una institución robusta con direcciones, coordinaciónes y áreas como la conocemos ahora, se iniciaron los procesos de acreditación, de educación integral, de deportes y prácticamente se formalizó una institución responsable de sus propios procesos desarrollando lo que es hoy: Una Institución suficientemente madura.



Justo en el paso de la nueva etapa de la Institución, Enrique se separó de la misma y emprendió otras tareas y no fue hasta varios años después, una vez que la Universidad que él soñó ya estaba consolidada, volvió para transmitirnos a las generaciones que no fuimos fundadoras, pero que nos toca ahora continuar con el legado, su visión y manera de conducir la Institución.

Enrique, siempre, y cuando lo afirmamos es porque así fue, respetaba la libertad de cátedra y las decisiones académicas que asumían las autoridades en quien había delegado la responsabilidad, era muy cuidadoso y se empeñaba en que innováramos en nuestra oferta académica, crecimos quizá demasiado y supo conducirnos nuevamente hacia lo simple, por ello la transformación de nuestra Misión y la reestructuración de nuestra Universidad, quitando todo aquel lastre y poniendo buenas maderas a flote.


Esta es solo una parte de la gran historia de nuestra Universidad Del Pedregal y de nuestro inspirador, la cuento porque cada vez que caminamos por la explanada, cruzamos los torniquetes y entramos a nuestros salones de clase, nos honramos de trabajar y estudiar en una gran institución que fue soñada para que los mejores fueran sus protagonistas.

Gracias Enrique por este encomiable obra a la que honraremos y haremos germinar día a día.

Dr. Armando Martínez Gómez
Rector de la Universidad Del Pedregal


El Lic. Enrique Canales Liceaga nació el 11 de septiembre de 1964 en la Ciudad de México y fue Director Ejecutivo de la Universidad Del Pedregal hasta el día que partió a la Casa del Padre, el 9 de marzo de 2015. Descanse en Paz.

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