El pasado
viernes 9 de junio tuve la oportunidad de moderar la mesa de diálogo “Déficit
democrático y la Estrategia Nacional de Cultura Cívica (ENCCÍVICA) 2017-2023”
de la 05 Junta Distrital Ejecutiva en presencia de autoridades del Instituto
Nacional Electoral y del Instituto Electoral de la Ciudad de México (antes
IEDF), ciudadanos, representantes de partidos políticos como el PAN, PRI y PT,
así como autoridades públicas.
Para
llevar a cabo esta tarea tuve la oportunidad de reunirme con la Vocal de
Capacitación Electoral y Educación Cívica del INE la Mtra. Sonia Borrás, quien
comenzó la reunión con una reflexión que marcó mi perspectiva sobre la realidad
de la participación ciudadana en nuestro país, afirmando que actualmente la
democracia está en riesgo, que los ciudadanos prefieren se les restrinjan sus
derechos humanos como forma de sentir seguridad en lugar de confiar en las
autoridades, instituciones, partidos políticos y procesos democráticos, lo cual
se vuelve una problemática sumamente grave y que todos como sociedad tenemos la
obligación de hacer algo al respecto.
Con esta
idea en mente y para dar respuesta a la problemática el INE propone las mesas
de diálogo, mismas que surgen como una convocatoria abierta a los ciudadanos,
autoridades y partidos políticos para propiciar el diálogo, generar acciones y
fortalecer lo que denominan como ENCCÍVICA, estrategia que tiene la misión de
fortalecer la cultura cívica ya que ésta es la condición necesaria para la
democracia.
Actualmente hay una marcada ausencia de la ciudadanía en los
procesos de ejercicio de autoridad, algunos de los datos más relevantes que se
presentan como punto de partida para fundamentar lo anterior son los que se
obtienen del Informe País y que se vuelven una llamada de atención a la
realidad política y social en la que vivimos:
● Actualmente el 67.56% de la población
tiene poca confianza en las autoridades mientras que el 12.8% no confía en lo absoluto: lo que
implica que cerca del 82% de los mexicanos no confía en las autoridades.
● Policías y jueces tienen un nivel de
confianza por debajo del 30%, y el 22.9% de la población no considera que valga
la pena acercarse a los tribunales para interponer una demanda.
● El 84.3% de la población está
interesado en informarse sobre lo que hace el gobierno, pero el 68.1% no
confiaría en la información.
● El 17% de las personas confía en los
partidos políticos y el 16% en los diputados.
● México está dentro del 25% de países
con mayor desigualdad en el mundo y dos de los más desiguales de la OCDE.
● El 1% de la población posee el 43% de
la riqueza en México, somos la 14a. economía del mundo y hay 53 millones de
personas viviendo en la pobreza.
Y la gran
desconfianza y debilitamiento no se
limita únicamente a las autoridades, uno de los datos que más impacto causa es
que el 77% de la ciudadanía considera que no se puede confiar en las personas.
Es por esto
que el ejercicio democrático del que como Universidad formamos parte resultó
tan importante y valioso, ya que en un ambiente de respeto, tolerancia,
apertura y diálogo se escucharon las voces de diversos miembros de la
ciudadanía, de partidos políticos y de las autoridades, incluida la
participación de Patricia Coss y de la Mtra. Georgina Velazco como dignas
representantes de la Escuela de Derecho.
Algunos de los acuerdos más relevantes
tomados esa tarde- noche es que es necesario crear educación y cultura cívica,
de manera transversal y heterogénea, que permita construir la democracia desde
abajo y que se adapte a las nuevas tendencias en el uso de los medios
tecnológicos y de comunicación, que se vuelva un ejercicio lúdico e integral, y
no un programa que es simplemente impuesto.
La participación y el papel de los
ciudadanos es clave, ya que existen prácticas que deben reforzarse y retomar
algunos ejemplos de lo que ya sucede en ámbitos no políticos, y crear
observatorios ciudadanos que no solo se encarguen de vigilar, sino también de
construir una cultura de participación y democracia. Por último uno de las
ideas más importantes es respecto al papel de la juventud, ya que se debe dejar
atrás la apatía y desconfianza que tienen los jóvenes actualmente y se debe
propiciar que tomen un rol más activo, y esta tarea no solo es de los jóvenes,
sino de todos los que de una u otra forma incidimos en ellos, por lo que se
deben crear espacios y estrategias para fomentar su participación activa,
análitica, crítica y propósitiva para cambiar la realidad, y estoy segura, como
catedrática y colaboradora de la Universidad Del Pedregal, que ésta será una de
las tareas en las que nos enfocaremos de manera puntual y prioritaria en el
corto plazo.
Esta mesa de
diálogo es la primera de muchas otras por venir, en donde ahora se tendrá el
objetivo de establecer acciones específicas a realizar en las temáticas
planteadas en esta mesa inicial, la primera de ellas sucederá el próximo 13 de
septiembre a las 17:00 hrs., a la que toda la comunidad de la Universidad está
invitada, en dónde será relevante escuchar las voces de nuestros
universitarios, docentes y colaboradores respecto a qué podemos hacer todos y
cada uno de nosotros para poder reconstruir la democracia y confiar nuevamente
en nuestras autoridades, pero más importante, confiar nuevamente los unos en
los otros.
Comparto la
liga para acceder a los cortos generados por el INE para que conozcamos un poco
más sobre ENCCíVICA y algunos de los datos que motivan esta estrategia:
Por: Mtra. Sara Negrete Viveros
Contacto: sara.negrete@upedregal.edu.mx
Twitter: @Saris23
Los puntos de vista expresados en este artículo son responsabilidad del autor y no necesariamente representan la posición de la Universidad Del Pedregal.